Nuevas formas de arte: LOOPS

El video arte se entiende como la utilización de medios electrónicos (analógicos o digitales) con fines artísticos. Apareció simultáneamente en Europa y Estados Unidos a partir de la década de los sesenta y hoy continua vigente su componente moderno y contracultural. El video arte poco a poco ha ido ganando terreno en su reconocimiento museológico, a pesar de estar todavía generalmente excluido de las cadenas oficiales de difusión.
Surgió como resultado de la búsqueda de alternativas para economizar la producción cinematográfica tradicional. El vide oarte no necesariamente cumple con las convenciones del cine; puede no emplear actores, diálogos, puede no tener una narrativa o un guión, en definitiva, puede traspasar muchas de las normas preestablecidas en el cine que lo definen como materia de entretenimiento.
Los profesionales de esta joven disciplina son los llamados video artistas, personas que prefieren alejarse de los convencionalismos y que rompen con los parámetros comerciales en busca de medios más económicos de producción pero no por ello de menor valor.
Existen parámetros poco claros para definir el uso del vídeo por parte de los video artistas porque el videoarte no ha crecido bajo los limites de un ensayo, ha evolucionado y lo sigue haciendo en relación a los avances tecnológicos y la experimentación gira en torno muchas temáticas. Aún así, se pueden diferenciar dos grandes variantes en cuanto al uso del video, por una parte y quizá la más reconocible por el gran público la grabación de acciones; performances pregrabadas en el momento de las intervenciones de los artistas con las que se pretende recuperar la noción de tiempo real. Por otra parte, otro de los ejes sobre los que ha girado el videoarte ha sido la investigación del espacio-tiempo; de estas ha surgido la idea de espacio, entendido como recorrido, y el tiempo, entendido como período.
Nam June Paik y Wolf Vostell son considerados los primeros video artistas. Desde la primera exposición, Paik determinó los ejes mayores de este nuevo arte: experimentar a partir de elementos mecánicos del aparato, destrucción de la imaginería televisiva popular y cuestionamiento del papel del telespectador en la sociedad de masas.

En los últimos años la tecnología audiovisual se ha introducido de lleno en el ámbito del arte, con el paso de los años, estos medios han evolucionado mucho lo que ha hecho elevar su potencial y calidad técnica asta cuotas que antes solo eran accesibles al cine. Este perfeccionamiento, la variedad de propuestas y lo mucho que han confiado muchos artistas en esta disciplina ha favorecido a que la video creación forme parte ya de algunas de las mejores colecciones de arte contemporáneo del mundo.

Uno de estos organismos que confió la video creación fue ART BARCELONA (Associació de galeries d’art contemporani), que impulsó la creación del festival LOOP el año 2003. Tenían entre manos una disciplina joven y poco consolidada y decidieron crear este festival para definir el futuro del video arte y los pasos a seguir en el futuro.
Este año ha cumplido su quinto aniversario y ya se ha convertido en uno de los espacios de exposición más reconocidos en todo el mundo.

El festival se celebró del 31 de mayo al domingo 3 de junio en Barcelona, y ha contado con la presencia de más de 800 artistas de 47 nacionalidades distintas y 45 galerías y expositores de todo el mundo. Según su director Emilio Álvarez, “LOOP aspira a convertirse en el punto de encuentro de todos los interesados en el videoarte a nivel mundial”. Y hoy en día ya se puede asegurar que el LOOP es una de las muestras en materia de videoarte más reconocida.
Otro de los propósitos a medio plazo del LOOP es ser un punto de referencia donde someter a debate, entrar en contacto con las nuevas creaciones, y ser una plataforma activa de difusión, creación y gestión, para todos los amantes del video arte.

Artistas, galeristas, comisarios, aficionados al video arte, coleccionistas y público en general han recorrido la ciudad de Barcelona durante doce días en busca de uno de los 104 puntos LOOP que inundaban estos días la ciudad. El festival se ha desarrollado en espacios como museos, centros culturales, galerías de arte, tiendas y bares. Los artistas han podido presentar sus propuestas en alguno de los lugares que han integrado las cinco rutas del video arte: Raval, Montjuic, Born / Ciutat Vella / Barceloneta y Eixample/Gràcia/Horta y 22@.
Además este año el festival ha incluido una iniciativa llamada LOOP Magreb/Pakistán, con la que se ha pretendido acercar el video arte de estas regiones al público en general, colocando videos en tiendas y restaurantes marroquíes y paquistaníes del barrio del Raval, donde se concentra la mayor parte de inmigrantes de Barcelona.
La capital catalana ha sido participe y parte fundamental, por tanto, de todo el festival, demostrando una vez más su espíritu vanguardista en materia artística y sigue consolidándose como una de las ciudades a nivel mundial con más movimiento artístico. Seguidamente al LOOP, se esta celebrando en la ciudad el Swab donde el dibujo, la pintura y las instalaciones son los protagonistas.

Otro de los atractivos del LOOP es que la mayoría de las propuestas que se han podido ver estos días eran obras que se presentaban en première. La fuerte proyección que se dio al festival en las anteriores ediciones a nivel internacional ha hecho que numerosas galerías de todo el mundo hayan querido asistir para mostrar por primera vez las obras de sus artistas. El 77% de las obras presentadas este año en Barcelona, son realizaciones del 2006 y 2007. Exactamente 17 de las 44 galerías participantes han presentado su obra en première.

El festival se ha divido como cada año, en tres grandes ejes: el festival, la feria y los paneles. Un proyecto dirigido por Emilio Álvarez, Carlos Duran y Llucià Homs. El festival agrupó las muestras de los trabajos de estos 800 artistas repartidos por toda la ciudad. Por otro lado, el Hotel Catalonia Ramblas ha acogido este año la feria, donde 44 galerías y distribuidoras han expuesto sus trabajos en las habitaciones del hotel. Un espacio moderno, dinamizador y original; cada galería contaba con una habitación del hotel que ambientaron a su gusto, con grandes pantallas, luz tenue, silencio o infinidad de sonidos, olores y sinuosidad. También hubo quien utilizó el baño, además los galeristas podían disponer de la habitación como alojamiento durante toda la semana.
Finalmente, los paneles LOOP han reunido a expertos de instituciones como el MOMA, el Centro Pompidou, el ZKM de Karlsruhe o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, en una rueda de debates sobre los diferentes aspectos de la conservación, la distribución, los nuevos canales de distribución y nuevas tendencias del video arte.
Doce días de festival que seguro se repetirán el año que viene en un espacio abierto a todos los amantes del video arte. Una joven forma de arte eminentemente conceptual, que no requiere de una historia ya que tiene un fondo meramente interpretativo. El simbolismo que pueden tomar en la mente del espectador dependiendo del contexto y la manera en que se muestra.

“Hace 40 años que este arte existe, pero sólo ahora, con la fácil obtención de medios tecnológicos, ha podido crecer y extenderse”, dijo Emilio Álvarez, uno de los co-directores de LOOP. Al video arte le quedan años de crecimiento pero gracias a este tipo de festivales la gente de a pie puede empaparse de nuevas formas de arte que seguro empezarán a ser valoradas como tales, expuestas en grandes museos y siendo piezas imprescindibles para los coleccionistas de arte, otro de los objetivos últimos del festival.